plusLo más reciente

Cómo saber si lo que compras es realmente miel

Si quieres miel, asegúrate de comprar miel. La primera alerta puede ser el precio, si es muy barata tal vez estés comprando sucedáneos.

Esta práctica supone una grave amenaza para la apicultura. No solo engaña a las personas consumidoras, sino que también perjudica a las productoras locales, poniendo en riesgo la sostenibilidad de las colmenas y la biodiversidad.

La clave está en el etiquetado

Para saber si lo que compras es realmente miel, debes fijarte en la etiqueta. Una buena idea es comprar miel etiquetada como Eusko Label, esa seguro que es buena, pero si no fíjate bien en la etiqueta. La etiqueta facilita información del producto y te permite comparar y elegir antes de comprar. Léela atentamente y comprueba si hay más componentes además de la miel.

En ella encontrarás el nombre del producto. En el caso de la miel, existen varias posibilidades: “miel de flores o de néctar o miel”; “miel de mielada o miel”; “miel filtrada”; “miel en panal”; “miel con trozos de panal”; “miel escurrida o miel”; “miel centrifugada o miel”; “miel prensada o miel”; “miel industrial”. Esta última deberá incluir en la etiqueta “únicamente para cocinar”.

Ejemplo correcto: Miel de brezo de las Encartaciones.

Ejemplo incorrecto: Miel filtrada de flores de la UE y de otros países (debe indicarse siempre el listado completo de los países en los que se recolecta la miel o sus mezclas).

Ejemplo incorrecto: Menciones como “superior”, “de abeja”, “natural”…

La miel para uso industrial y la miel filtrada no pueden llevar añadidos en el nombre, pero en el caso del resto de denominaciones se podrá añadir:

  • El origen floral o vegetal, si esta procede en su totalidad o en mayor parte del origen indicado. Ejemplo: Miel de brezo.
  • El origen regional, territorial o topográfico si el producto procede en su integridad del origen indicado. Ejemplo: Miel en panal de las Encartaciones.
  • Criterios de calidad específicos.

En el caso de mieles recolectadas en diferentes países deberán listarse todos los países donde se ha recolectado la miel.

Otras obligaciones comunes que deben aparecer en el etiquetado:

  • Cantidad neta
  • Fecha de duración mínima o fecha de caducidad.
  • Condiciones de uso y conservación.
  • Identificación de la empresa fabricante, envasadora o comercializadora dentro de la UE y su domicilio.
  • Lote
  • Si pertenece a algún Consejo Regulador de la DOP, o Marca colectiva de calidad, o si está registrada en el comité de Agricultura ecológica correspondiente al símbolo pertinente.

Lista de ingredientes:

Si se ha utilizado la miel industrial como ingrediente en un compuesto alimentario, el término “miel” se podrá utilizar en el nombre del alimento, pero en la lista de ingredientes deberá utilizarse el término “miel para uso industrial”.

Más información sobre el etiquetado de la miel aquí.